Aunque Fred no estaba de acuerdo con su profesor, él continuó estudiando en la universidad, pero él cambió sus estudios. Después de su experiencia en la pradera, Fred se dio cuenta que él quería aprender tanto como pudiera. Él continuaba teniendo sueños en un idioma que él no hablaba y cada vez que él los tenía, él recordaba el secreto y el camino que él tomó para aprenderlo. Es por este secreto que él quería estudiar todos los temas que él podía. Con toda esta información, él se convirtió en un bibliotecario. Le gustaba viajar, por eso él trabajó en muchas bibliotecas en todo el mundo.
Cuando vivía en Connecticut, para trabajar en la biblioteca de Yale, él conoció a una mujer muy bonita. Ella era una estudiante de Yale y se conocieron cuando ella estudiaba para sus clases en la biblioteca. Ellos hablaban mucho y Fred la amaba porque ella era muy inteligente. Fred le dijo a ella sobre todo su tiempo con los indios. Él discutió la ropa extraña, las tolderías de cuero, sus sueños y le contó que él se levantaba antes del alba. Él le dijo sobre el sacerdote. El sacerdote quería que Fred recordara sobre su sueño y confiara en él. Después del sueño con bisontes, el sacerdote le dijo a Fred el secreto muy importante. La mujer amaba la historia y eventualmente se casaron.
Ellos tuvieron una vida muy feliz, por un tiempo, pero Fred estaba inquieto y quería que ellos viajaran a un nuevo lugar. La mujer no quería hacerlo porque Connecticut era su hogar. También, Fred continuó hablando de la importancia de su secreto, pero no le dijo a ella. Eventualmente, ella estaba enojada con el secreto porque ella quería entender más sobre la vida de Fred, pero ella sentía que ella no podía si Fred no le decía el secreto. Eventualmente, se divorciaron. Fred se entristeció y sintió nostalgia por la pradera en que él había vivido por muchos años. Eventualmente, él regresó a la pradera para vivir con los indios. Una vez más, él vivía con la ropa extraña en las tolderías de cuero, tenía sueños y él se levantaba antes del alba. Él vivió en la pradera por toda su vida, hasta que él murió.