Entre mi penúltimo año y último año de escuela secundaria, tuve una experiencia que cambió mi vida para siempre. Fui voluntario para una misión de la Iglesia Metodista para ayudar a reconstruir casas dañadas en Kentucky.
Trabajé para un organización llamada Appalachia Service Project (ASP). El objetivo es reconstruir las casas para que sean más cálidas, y seguras. La región de Appalachia incluye partes de Kentucky, North Carolina, West Virginia, Virginia, Tennessee y esta área es demasiado pobre.
La misión fue de nueve días. En los días primeros, tenía un poco miedo porque en Kentucky es muy lejos de toda mi familia y mi perro. Pero, hice muchos amigos nuevos durante la misión, especialmente después de trabajar con ellos.
Durante la semana, trabajé para una anciana adorable y muy cariñosa. Se llama Pam. Pam había vivido en una casa condición horrible por muchos años. No había agua corriente en su casa porque la compañía de agua cortó (Pam no tenía un trabajo, entonces no tenía dinero suficiente para vivir una vida de calidad). Los paredes y pisos estaban en descomposición porque la lluvia penetraba en su casa. Unas ventanas estaban rotas. En un dormitorio, había abejas antipáticas. Los pisos estaba en mala condición. Pam necesitaba socorro desesperadamente.
Esta situación es muy similar a otras casas en la región. La razón es porque la economía de la región dependía de la industria del carbón. Un día no había más carbón en las montañas, y la economía fue destruida porque las compañías decidieron irse lejos. Hay mucho desempleo y personas que abusan drogas como heroína y metanfetamina.
Para la casa de Pam, el líder de organización dijo a mi equipo “Ojalá puedan reemplazar el piso malo con un piso nuevo y fuerte.”
Durante la semana, ayudamos a transformar la casa de Pam. Ella estaba emocionada durante la semana porque ella no podía creer que personas viajaran de Massachusetts para ayudar cuando ella aplicó por socorro. Ella lloró al fin de la semana en gratitud por la obra de mi grupo.
En ese momento comprendí la importancia de mi ayuda en la vida de Pam. Y también, aprendí que afortunado por las muchas oportunidades en mi vida. Los niños en esta área de Kentucky no van colegio porque es demasiado caro. Tengo mucha suerte por la oportunidad para asistir al colegio en un ambiente seguro. Doy gracias con frecuencia porque vio malas condiciones de la vida en Kentucky y tengo gratitud que no vivo en una zona pobre. También aprendí el valor de ayudar a personas en circunstancias desafortunadas.