Cuando llegué a la Universidad de Michigan en agosto, estaba muy emocionada por las nuevas clases, experiencias y amigos. Sin embargo, estaba un poco nerviosa y tímida también. Al principio del año fue difícil para mí porque estaba en un nuevo lugar lejos de mi casa y no tenía amigos en mis clases. La primera semana de escuela, mi amiga me sugirió que probara para el equipo de fútbol. Yo no quería ir porque estaba muy nerviosa, sentí que no tenía tiempo y estaba muy estresada con mis clases, y no pensaba que fuera una buena idea hacer más actividades. Sin embargo, fui a la prueba. Ahora, estoy alegre que estoy en el equipo porque he hecho muchas amigas nuevas, me ayuda a hacer ejercicio y tengo la oportunidad de jugar el deporte que amo. Además, tengo la oportunidad de viajar a otros lugares, como Wisconsin y Texas. Creo que el deporte me ayuda a mantenerme enfocada porque yo sé que no tengo mucho tiempo los martes, miércoles y jueves porque tengo las prácticas. También, con el paso del tiempo, las cosas mejoraron. Mi compañera de cuarto y yo nos hicimos amigas buenas e hicimos nuevos amigos en nuestro dormitorio. Me gusta pasar tiempo con ellos porque son amables, cómicos y divertidos para estar cerca. También, comencé a sentirme más cómoda en mis clases porque comencé a entender cómo usar Canvas e hice amigos en clase que me ayudan con la tarea y mis estudios. Todavía es difícil de manejar mi tiempo con las clases, las prácticas, los juegos de fútbol y mi tiempo con amigos, pero creo que estoy aprendiendo a equilibrar todo, día a día. Estoy empezando a sentir que pertenezco aquí.