Tenía un plan para el crimen perfecto. Quería robar la tienda en mi pueblo. Era una tienda grande, con todas las cosas que cualquier persona necesita. La tienda tenía ropa hermosa, dinero, muchos tipos de comida deliciosa, todas las cosas de primera necesidad. Éste era el plan:
Fui a la tienda muy tarde en la noche; intenté robar después de que los clientes salieron, y cuando había sólo había un cajero. Entonces, apagué la televisión. Pedí ayuda para encontrar muchas cosas diferentes para que el cajero era confundido. Quería robar la tienda cuando las estaba buscando. ¡Pero el cajero no quería ayudarme!